PORTUGAL
El año 2024 lo comenzamos con unas vacaciones. Dado que en Septiembre del 2023 tuvimos una camada, nuestras dos semanas de vacaciones fueron destinadas a los cuidados de los bebes y la mami, así que, necesitábamos una desconexión en familia, y decidimos visitar nuestro país vecino.
En este viaje, nos acompañaron nuestras dálmatas Argi y Euri, junto con Bizkor, el hermano de Argi.
El viaje hasta nuestro destino fue largo, 12h horas teóricas, que al final se convierten en 15, entre parada y parada. Así que, nosotros decidimos hacerlo en dos tramos y parar en Madrid para dormir.
Nuestro destino era Sao Pedro da Cadeira, un pequeño pueblo costero. Allí una maravillosa casa nos esperaba.
Llegamos a una buena hora, a media tarde ya estábamos instalados, así que nos dio tiempo para pasear hasta la playa, vaciar maletas, encender el fuego en la casa, ponernos cómodos y descansar, que tras dos días de viaje, lo teníamos merecido.
Al día siguiente fuimos a visitar la localidad de Óbidos. Un pintoresco pueblo fortificado, con un castillo bien conservado y un laberinto de calles y casa blancas. Bonita ubicación con ambiente medieval, cuyas calles recorrimos y donde fuimos el espectáculo del día, ya que la gente no paraba de hacernos fotos y pedirnos fotografiarse con nuestros dálmatas.
Después de visitar y comer en Óbidos, nos dirigimos a Caldas de Rainha, otra bonita población, esta ya mucho mas moderna y actual, pero la cual era muy tranquila y de cuyo parque pudimos disfrutar y realizar un paseo tranquilo. Nuestra hija Eider, también tuvo su tiempo para jugar en un parque infantil, ya que, cada uno necesita tiempo para satisfacer sus necesidades lúdicas.
Hacia las 18h-19h, ya estábamos en casa. Para preparar la cena, ponernos cómodos y calentar la casa. La verdad es que para ser Enero, y comparando con el clima de nuestra casa, no hacia nada de frio. Por la noche bajaba a 10ºC y durante el día, nos acercábamos a los 17-18ºC, pero igualmente, calentar la casa con el fuego a tierra era un gustazo. Además, visitar ciudades y lugares nuevos es un placer, pero hacerlo con una niña de 5 años y 3 perros, tiene un grado mas de agotamiento, así que, a todos nos iba genial llegar a casa, ponernos el pijama y tumbarnos en el sofá.
Los dos días siguientes, llevamos la misma dinámica. Despertarnos, pasear por la playa, ya que la teníamos a 10 minutos a pie de la casa, así lo perros corrían libres y jugaban, antes de embarcarnos en los paseos por ciudad con correa. Hacer turismo y volver a casa para cenar y descansar.
Os comparto un recopilatorio de fotos de Lisboa y Sintra. En ambas ciudades no quedo mucho por visitar, pero Sintra fue la que mas nos cautivo. Es una ciudad, con carisma de pueblo, situada a las faldas de las montañas. Esta lleno de villas y palacios de color pastel, muchos de ellos de estilo árabe.
Tanto en una ciudad como en la otra, las palabras amables y caricias para nuestros dálmatas eran interminables, la ciudad se giraba en cuanto nos veían pasar.
Comer bien fue muy fácil. La gastronomía portuguesa es buenísima. En Lisboa comimos en el restaurante Solar31, restaurante especializado en pescado y marisco, donde nos atendieron y comimos de maravilla, a muy buen precio. En Sintra en el Tascantiga, un bar de tapeo buenísimo y de estilo bohemio.
En ambos restaurantes, al no hacer calor, dejamos un rato los perros descansando en el coche, y comimos sin ellos.
Para acabar las vacaciones, nuestro ultimo día en la casa, lo pasamos tranquilo. Además, nos coincidió que fue un día de lluvia suave. Así que decidimos pasear por los alrededores del pueblo, y mucho descanso, mucho sofá, comer y películas, que al final, hacer turismo cada día, nos dejo algo agotados.
Antes de volver a casa, pasamos por la Exposición Internacional de Arruda dos Vinhos, donde Euri participo por primera vez, y sus primos Bizkor y Argi lo hicieron genial, Argi, obteniendo otro CACIB necesario para obtenerse con el titulo de Campeona Internacional.