Nosotros somos unos criadores familiares, en ningún momento vivimos de ello, es nuestra afición. No tenemos camadas anuales.

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Pero si somos profesionales, profesionales en cuanto a el trabajo bien hecho. Miramos muy bien los machos elegidos para nuestras hembras, analizando sus pedigrees y ver su compatibilidad física, pero, sobre todo, seleccionando ejemplares sanos, física y psicológicamente.

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Para nosotros, lo más importante es un perro mentalmente sano, un perro equilibrado, representando la raza como se debe. Perros sobre todo alegres, libres de nerviosismo, miedo o agresividad. Perros con los que se puede ir a todas partes y se llevara bien con todos los miembros de familia e incluso con gente desconocida.

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Nuestras perras son parte de nuestra familia y viven con nosotros, en el amplio significado de la palabra, todas ellas. Los cachorros nacen en casa y aquí permanecen hasta marchar a su definitivo hogar.

Son cuidados de la mejor manera que podemos, cuidando su alimentación, basada en alimentos naturales y una dieta equilibrada. Viviendo en casa, guardándose siempre del posible frio o calor. Cuidando su sociabilización con el entorno, acostumbrándolos poco a poco, siempre respetando su edad, a diferentes ruidos, superficies y lugares.

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Nos apasiona la raza dálmata y queremos ayudar a mejorarla mediante nuestros conocimientos y creencias, por eso creemos en la calidad y no en la cantidad.

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Todo aquel que desee tener un cachorro nuestro, tiene las puertas de casa abiertas, para venir a conocer a los progenitores y ver en el entorno que viven, hablar con calma y explicar bien como es la raza dálmata. Por ese mismo motivo, nunca enviaremos cachorros mediante transportes, todos los cachorros serán entregados en mano.